Vivir en el diario con un Maine Coon es una experiencia fascinante y rica de cambios, de lo que no se dice, de aprendizajes, de momentos de alegria intensa y de momentos impregnados de una amargura cierta delante de su indiferencia, fingida por supuesto, pero que nos opone con mucha desenvoltura.

El Maine Coon conservo intactas todas las caracteristicas que hizo su valor en el XIX siglos, es decir un gato "ratero" incomparable o sin igual y sobre todo dotado de una constitución sólida que le permitió resistir en inviernos duros de Maine, cuna de su raza.

Hoy, es el representante de una de las razas mas bellas de gato doméstico. El color "tabby morena", los plumeros en la cumbre de sus orejas y su cola en penacho al pelaje muy surtido le confieren este paso singular de felino , pero es tan seductor cualquiera sea el color de su vestido.